Levántate desde ese rincón oscuro,
desde esa abrumadora soledad que te paraliza.
Levántate en el grito de tu propio silencio.
Libérate defendiéndote de los recuerdos tristes,
que agobian y desnudan tu fragilidad.
Apaga con tu espíritu los rayos que iluminan,
el festival clandestino de fantasmas trasnochados.
¡Levántate!..., porque la vida se pasa raudamente
y estás perdiendo la oportunidad de ser feliz.
No temas a los vientos despeinados del olvido;
tu corazón necesita volver a palpitar enamorado.
Imponle una tregua a tus largos desencantos
y atrévete a soñar sin temores ni revanchas.
Inventa una canción envuelta en esperanzas
y atrévete a soñar tus ardientes utopías;
que todo lo que sueñes puede hacerse realidad.
No sigas sometido al dolor de un desengaño;
si un día te mintieron, no debes claudicar.
Sonríe y desperézate de tu rebelde letargo,
del recuerdo que se vuelve tu propio carcelero.
Levántate de las cenizas que te volvieron olvido,
que aún no se ha hecho tarde para volver a amar.
Por allí te está aguardando cargada de ternuras
la mujer de tu costilla, la que debes encontrar.
Levántate y sonríe, que a pesar de etapas duras,
la vida nos permite volver a comenzar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario